Teatro y arte para resignificar la violencia
Al llegar al restaurante La Portada, el olor a campo no solo invade los sentidos, sino el corazón. Es eso, la sensación particular de sentirse en casa a pesar de estar muy lejos, ese es el poder de una cocina antioqueña. Al fondo de la tienda de dulces y fritos, saludando a las cocineras que están avivando el fuego constantemente y pasando un pasillo se llega a un comedor al aire libre donde se puede respirar aire puro. En ese lugar estaba Fredy Yhoany Morales Clavijo, a la espera de contar su historia, y con mucho por decir de un proceso que el mundo no conoce: la recuperación y reactivación de San Rafael.
Comienza hablando de su tierra, de San Rafa, con un amor al que solo se le compara el dolor que le causa la sangre que se ha derramado en el pueblo que es su hogar. Fredy es psicólogo, máster en artes escénicas y se ha dedicado toda su vida a trabajar porque los habitantes de San Rafael salgan adelante luego de las épocas difíciles que han tenido que sobrellevar.
San Rafael hace parte de la región del oriente antioqueño, donde los 23 municipios que lo componen se dividen a su vez en 4 zonas: páramo, altiplano, bosques y embalses, este municipio hace parte de la última.
Hasta aquí llega la influencia de los grupos armados, de Pablo Escobar y tantos escenarios violentos que no solo afectaron a la ciudad, sino a la ruralidad en diferentes ámbitos. Pero la violencia no fue la única que causó estragos. La construcción de la autopista Medellín-Bogotá significó según él todos los despojos y desplazamientos que usted quiera. Pero de esto puede hablarse. No se los permitieron.
En el momento en que pretendieron hacerlo visible en el informe de derechos humanos del año 2008, tres horas antes llamaron a todos los líderes que estábamos al frente del informe y nos amenazaron de muerte. Fue como si nos hubieran dicho: no lo presenten. Pero no le tiembla la voz para hablar de esto, ni de nada. Habla con la propiedad y firmeza que solo un líder puede tener.
Comienza entonces a contar las anécdotas sobre la llegada del grupo armado de las FARC al pueblo, de cómo a través de su política de protección a los campesinos consiguieron la aprobación de los habitantes que luego se convirtieron en víctimas. Conoce todos los antecedentes de su pueblo, desde los intereses políticos que tenían los altos mandos hasta los datos más oscuros de la historia del departamento.
La mayor parte de los líderes de la Unión patriótica fueron asesinados en este territorio, dice Fredy, mientras comienza a relatar la primera masacre que se dio en tierras sanrafaelitas, la de 1988, donde el ejército de la república asesinó y cortó con hachas y machetes a 14 mineros de la vereda el topacio los días 11, 12 y 13 de junio, esto debido a que eran el apoyo de la Unión Patriótica, que a su vez tenía inclinaciones paramilitares y quienes se encontraban incentivando a los habitantes de esta vereda a hacer valer sus derechos, y a volver su negocio legal.
Y así, entre relatos y experiencias, este hombre apasionado por la paz y la reconstrucción de su pueblo nos incitó a seguir buscando respuestas sobre qué había sucedido después, y cómo San Rafael decidió renacer de las cenizas.